De trabajar en el campo ayudando a su familia, a posicionarse entre los mejores corredores del continente; esta es la historia del atleta Mario Pacay.
De respuestas genuinas, Pacay cuenta que la necesidad de superarse lo inspiró a no darse por vencido en cada entreno y competencia, que a los 16 años tomó la decisión más difícil de su vida al mudarse a la ciudad capital y que le apasiona la lectura y la marimba.
¡En sus marcas, listos, fuera! El protagonista de nuestro espacio de entrevista de esta semana, trota a su ritmo en el tartán azul del estadio Doroteo Guamuch Flores y sonríe con destellos de sencillez.
Es una mañana nublada y con leve llovizna en el recinto de la zona 5, donde el fondista Mario Pacay reactiva sus entrenamientos en la semana previa al Medio Maratón Internacional de Cobán, tierra que lo vio nacer un 20 de julio de 1997.
Tras cinco años de haberse calzado los tenis por primera vez (cuando seguía las zancadas de sus hermanos en la aldea San Pablo Xucaneb) Pacay ya es un referente del fondismo guatemalteco y aspira a seguir imponiendo sus condiciones en la pista y en la ruta.
Es uno de los atletas que forma parte del Programa de Retención de Talentos del Comité Olímpico Guatemalteco, que cuentan con respaldo sistemático en las áreas técnica, física, nutricional, psicológica y de ciencias aplicadas.
El ascenso de Pacay a la élite del atletismo llegó con la conquista de la medalla de bronce en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz 2014, en la prueba de 5 mil metros.
Luego plasmó su calidad en los Juegos Centroamericanos de Managua 2017, al consagrarse con un oro en el evento de 1,500 metros y dos platas en 5 y 10 mil metros. El año pasado saboreó la gloria al ganar dos platas en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla, también en 5 y 10 mil metros.
En la evolución de su legado, Pacay es dueño de los récords nacionales en las pruebas de 5 mil metros (tiempo de 13:44:93 minutos conseguido en abril de 2018) en 10 mil metros (con 28:29:50 minutos fijado en marzo de 2019) y en los 21 kilómetros (con 1:03:54 horas logrado en enero de 2019).
Sembrador de sueños
Con la aparición de los rayos de sol, Pacay habla de sus orígenes: “Antes de correr trabajaba en el campo con mi familia, sembrando maíz, frijol y brócoli. Además me dedicaba a la crianza de chivos”.
El atleta que tiene marca de acceso a los Juegos Panamericanos de Lima 2019, no olvida la fecha exacta en la que comenzó a correr: “Fue un 15 de septiembre cuando en el lugar donde estudiábamos hicieron una competencia y me animé a correr siguiendo a mis hermanos”.
“Usaba zapatos de hule, hasta que compré mis primeros tenis que me costaron Q35. Esa necesidad, de no tener nada, me motivó a seguir mejorando”, añade.
“Sin saber lo que hacía”, Pacay siguió entrenando y se apuntó al Medio Maratón de Cobán, donde fue captado por el entrenador Carlos Trejo, quien le ofreció una prueba para ser parte del equipo.
“Me pidió una marca mínima de 14:59 minutos para la distancia de 5 mil metros y yo corrí 15:30, así que me integró a su equipo”, recuerda sobre la prueba que realizó en el Parque Erick Barrondo.
Luego vendría el momento crucial que cambió su vida: “Con 16 años hablé con mis papás sobre la posibilidad de mudarme a la ciudad, se preocuparon y se entristecieron mucho. Pero yo estaba decidido a hacer el sacrificio. Descubrí mi talento y estoy aprovechándolo para representar a mi familia y a mi país”.
“Para mí todos los obstáculos los he convertido en motivación, tenemos que trabajar fuerte para alcanzar lo que queremos”, recalca.
Para Pacay, soportar el ritmo monótono en la pista de 12 y media y 25 vueltas (de las pruebas de 5 mil y 10 mil respectivamente), es cuestión de mentalidad fuerte y mantener la concentración.
“Hay muchos corredores que se desesperan porque no es un paso cómodo, debe ser competitivo”, explica.
Para cerrar, Pacay le deja un consejo a los jóvenes que dan sus primeros pasos en el deporte: “Lo principal es que te apasione lo que hagas, eso a la larga da sus frutos. También es importante empezar poco a poco, aprendiendo a conocer tu cuerpo”.
Pacay en corto
¿Cómo te definirías en una frase?
Soy un servidor.
¿Sino fueras deportista, en donde te verías?
Cerrando mi carrera universitaria o trabajando en el campo.
¿Qué personas te inspiran?
Erick Barrondo, quien nació en mi departamento. Pero pienso que no importa de donde venimos, sino a dónde llegamos.
¿Lugares favoritos?
Cobán y Tecpán.
¿Una competencia inolvidable?
Los Juegos de Barranquilla, en los que gané dos medallas que no serán fáciles de repetir.
¿Un género de música?
Me gusta y me motiva la marimba.
¿Cuál es tu máximo sueño”
Clasificar a Juegos Olímpicos, no importa en que distancia.
¿Cuál es tu meta pendiente?
Ganar el Medio Maratón de Cobán y clasificar a Juegos Olímpicos.
¿Qué lecciones te ha dado el deporte?
Disciplina y perseverancia.
¿Cuáles son tus pasatiempos?
Ver el Facebook, porque me gusta seguir las noticias del mundo, leer libros de motivación y liderazgo, escuchar música y salir con mis amigos.